Foto macro: foto grande de lo más pequeño

Hay pocas técnicas más asombrosas y atractivas que la de la macrofotografía, entendida como “el arte de fotografiar primeros planos extremos”. Engancha a aficionados y a profesionales por su capacidad de acercar al ojo el impacto de un objeto pequeño a su tamaño real, incluso a un tamaño más grande. De repente, un motivo que se nos pasa inadvertido nos llena la retina con una explosión de colores y detalles difícil de reconocer a simple vista. Es, por tanto, un campo abonado a la creatividad gracias a las propiedades abstractas pero también al mundo documental que se vale de estas miniaturas para confeccionar todo tipo de catálogos, científicos o incluso comerciales. También hay que vender los objetos más pequeños, claro que sí, también hay que saber embellecerlos o fotografiarlos con la mayor fidelidad posible. Salimos, por tanto, a la naturaleza pero igualmente podemos aplicar la técnica macro a otras disciplinas como el eCommerce. Además, lo macro no sólo está relacionado con las pequeñas cosas sino que sirve para ampliar el detalle de una superficie grande. A fin de cuentas, macro es “grande”.

En cualquier caso, hay que tener en cuenta que al sacar a la luz estas imágenes, salen igualmente sus imperfecciones, cosa que hay que corregir durante el retoque digital. Para resumir, estas pueden ser las claves de nuestro acercamiento a la macrofotografía: iluminación, enfoque, profundidad de campo y, casi por encima de todo, composición. Metemos la fotografía macro en el microscopio. Nunca mejor dicho.
Opciones:
1-Función macro en cámaras compactas y móviles (representadas por el símbolo de la flor). No confundir con la auténtica técnica de foto macro que depende casi exclusivamente del objetivo empleado.
2-Objetivos normales. Si no se cuenta con un objetivo especializado podemos acercarnos a un buen resultado final si seguimos estos pasos: girar el enfoque hasta la distancia mínima (en manual) y colocar el zoom a la máxima distancia focal.
3-Objetivos macro (1:1 en factor de ampliación). Lo más recomendable. Objetivos que reducen la distancia mínima de enfoque para poder aproximarse más que con cualquier otro objetivo. Distancia focal: entre 50 (nos acercaremos más) y 200 mm (nos alejaremos más, bueno si incorporamos un flash anular). Nos interesan los más luminosos (apertura más grande).
4-Lentes o anillos conversores de aproximación (Close up). Funcionan como un filtro normal pero con efecto lupa. Elección más económica que la del objetivo pero menos recomendable en cuanto a calidad óptica. Variables a tener en cuenta: diámetro, número de aumentos y marca del fabricante.
5-Anillos inversores. Una opción divertida y barata que permite mediante un anillo de doble rosca colocar los objetivos normales del revés. La pirueta final es la de poder acoplar con este anillo el objetivo invertido a un objetivo tele enroscado comúnmente al cuerpo de cámara, consiguiendo así tener el control sobre el diafragma.
6-Tubos de extensión macro. Se interponen por rosca entre la cámara y el objetivo sin mediar ópticas adicionales pero demandan más luz. Al alejar el sensor del objetivo aumenta la distancia focal en función de la suma de 3 piezas (12, 20 y 36 mm). Variables: automáticos (los que no afectan a la comunicación entre cámara y objetivo) y manuales (cortan la comunicación).

Guía rápida de la fotografía macro:
-Elección del objetivo adecuado. Un teleobjetivo macro fijo puede ser la mejor.
–Trípode. Evitar que la cámara trepide y ayuda a conseguir el encuadre más exacto.
–Raíl milimetrado (opcional). Una buena idea para acercarnos y alejarnos del objeto de manera muy precisa y para hacer bracketing de enfoque o enfoque por apilamiento
–Colocación de cámara. Frontal al objeto mantendrá en foco todo al completo, mientras que si se angula se consiguen enfoques variables. Fondo sin distracciones. Para evitarlas, hay que desenfocarlo de manera natural.
–Composición. Mirar bien a través del visor. Buscar la imagen más impactante o la más representativa que facilite la mayor información posible.
–Enfoque manual. Aconsejable por encima del AF. Tanto en este punto como en al anterior, conviene utilizar el modo Live View de ampliación para moverse por todo el encuadre. En función del objeto, hay que elegir entre tener todo enfocado o elegir sólo una parte.
–Exposición. Elegir el ISO más bajo posible.
-Elección de la apertura más precisa para que quede enfocado únicamente lo que nos interesa. No es conveniente cerrar el diafragma al máximo (problema de difracción) sino que hay que encontrar el tan ansiado punto dulce para ganar nitidez.
–Profundidad de campo. Variables de control: distancia focal (cuanto mayor sea, menor es la profundidad), apertura (cuanto mayor sea, mayor es la profundidad) y distancia entre cámara y objeto (cuanto mayor sea, mayor es la profundidad).
–Iluminación. La luz ambiente siempre favorece pero nuestro estudio para foto macro no estará completo del todo sin un flash anular que incorporado en cámara distribuya la luz de manera uniforme sin arrojar sombras incómodas.
Algunos ajustes a realizar con retoque digital:
-Desenfocar el fondo.
-Enfoques selectivos.
-Limpieza de imperfecciones.
-Ajustes de color.

*Bracketing u horquillado de enfoque (Focus blending o focus stacking) para mejorar la profundidad de campo. Técnica utilizada para combinar la fotografía macro con la fotografía de producto. Debido a que en la macrofotografía, normalmente sólo una parte del objeto queda dentro del foco debido a la escasa profundidad de campo, esta técnica consigue meter el producto entero dentro de su enfoque.
-Disparar varias fotos al objeto variando los puntos de enfoque (en manual) y sin modificar los parámetros de apertura, velocidad de obturación, balance de blancos e ISO.
-Abrir las fotos en Photoshop. Archivo>Automatizar>Photomerge (desactivar Fusionar imágenes).
-Seleccionar todas las capas y fusionarlas (Editar>Fusionar capas automáticamente. Método de fusión: apilar imágenes).
-Capas>Combinar visibles (Mayúsculas+Ctrl+E) y Guardar.

Otro método de focus blending o merge:
-Disparar el objeto milímetro a milímetro desplazando la cámara por el raíl milimetrado sin tocar el enfoque ni ningún otro parámetro.
-Apilar todas las fotos. Abrir>Secuencia de comandos>Cargar archivos en pila. Elegir las fotos y activar casilla Intentar alinear automáticamente las imágenes de origen.
-Una vez lanzadas las imágenes, recortar los márgenes sobrantes.
-Seleccionar todas las capas y fusionarlas (Edición>Fusionar capas automáticamente. Método de fusión: apilar imágenes).
-Capas>Combinar visibles (Mayúsculas+Ctrl+E).