Cómo ‘borrar’ un tatuaje con retoque
Los tatuajes cuentan con millones de fieles en todo el mundo. Hay quien se tatúa por estética y quien lo hace para llevar siempre grabado en la piel un elemento de especial simbolismo visible para todos. Pero, en algunas ocasiones, es necesario ocultar ese tatuaje, como en las fotografías de moda de determinados ecommerce –no todos, ya que algunas marcas de moda joven están encantadas de que sus modelos los luzcan-. ¿Qué se hace entonces? ¿cómo se ‘borra’ un tatuaje? ¿hay que tratar una por una todas las fotos en las que el tatuaje esté visible?
Quitar un tatuaje puede ser una tarea muy sencilla, en la que se invierten unos pocos segundos, o muy complicada. Todo depende del tipo de tatuaje y de dónde esté situado. Quitar un corazón bien definido en mitad de un antebrazo, por ejemplo, es una tarea sencilla; pero es mucho más complicado quitar un tatuaje muy trabajado que asoma bajo el pantalón de un modelo, en un tobillo, porque puede haber vello, además de sombras de la ropa y un gradiente de luz que hay que conservar.
Podemos distinguir tres tipos de tatuajes, según la luminosidad, lo que implica que sea fácil, de dificultad media o difícil de ‘borrar’ a través del retoque. Un tatuaje fácil es aquel que no tiene muchos cambios de luminosidad y que con algunas herramientas de Photoshop, como el tampón de clonar, el pincel corrector o la herramienta parche, se pueden quitar fácilmente. Un tatuaje algo más complicado de eliminar podría ser uno que se vea en el límite del brazo, donde hay un cambio de luminosidad o de textura, o una sombra, lo que limita bastante a la hora de coger muestras con la misma luminosidad. Un tatuaje difícil de quitar puede ser uno que tenga zonas sombreadas, ya que así es muy difícil dar con el tono real de la piel del modelo, y que además esté situado en una zona limítrofe, donde sea difícil clonar.
A veces se utiliza en la sesión de fotos una media para suavizar las diferencias de luminosidad, ya que de otra forma, habría que clonar el brazo entero –o la pierna, según donde se encuentre el tatuaje-. Y no es lo mismo trabajar con una foto en la que el tatuaje se vea entero que con otra en la que parte del tatuaje esté tapado por la ropa, por ejemplo por la manga de una camiseta. En este último caso, el retocador debe coger un recurso que tenga el mismo tono de piel, la misma iluminación y la misma perspectiva que la toma original. Es un retoque muy complicado. De hecho, es uno de los retoques más complicados que se hacen en ecommerce, junto con la lencería.
“Para que las herramientas de clonado funcionen correctamente, lo ideal es coger la muestra desde un borde muy definido y clonar lo que sea necesario, evitando pinceles de dureza elevada. Con ello nos aseguramos conseguir gradientes de iluminación verosímiles. Aunque a veces sustituir un brazo entero puede resultar más fácil que tratar de eliminar un tatuaje en una zona complicada”, explica Javier, uno de los expertos retocadores de ProRetoque mientras termina de retocar una fotografía.
Además de la luminosidad, ¿el lugar donde está ubicado el tatuaje determina la dificultad de eliminarlo con retoque? “Sí, la textura de la piel es diferente en cada zona. Puede haber vello o no, puede ser una zona lisa o con alguna rugosidad, puede haber granitos, pecas…”, explica Javier. Habitualmente, es más fácil intentar quitar primero el tatuaje y después el vello, excepto si se trata de un modelo con mucho vello. Pero cada modelo y cada tipo de piel es un mundo. Y el retoque de tatuajes hay que hacerlo foto a foto, aunque se trate de una tanda de 40 imágenes del mismo modelo, ya que nunca estará en la misma postura, ni el tatuaje se mostrará de la misma forma en cada foto.
El retoque sobre la piel - Blog de ProRetoque - Blog de ProRetoque
19 enero, 2016 at 7:52 pm[…] en su eCommerce, pero la mayoría opta por taparlos para no restar protagonismo a las prendas. Para eliminar un tatuaje, el retocador lleva a cabo una separación de frecuencias y clona tanto el volumen como la textura […]