La iluminación en fotografía de eCommerce
En fotografía de eCommerce, el factor iluminación juega un papel fundamental a la hora de transmitir realismo y profesionalidad a través de las imágenes de producto. Una buena iluminación en fotografía de eCommerce debe destacar todas las características del producto de forma que el cliente, al ver la fotografía, tenga una idea precisa de lo que va a recibir en casa tras la compra.
La fase de postproducción de imágenes es uno de los elementos clave para conseguir fotos de calidad en una tienda online. Por ello, es importante aprender a trabajar con la luz, tanto en el momento de la toma de la fotografía en el estudio como de forma digital a través del retoque.
A continuación vamos a ver qué recomendaciones se han de de seguir para conseguir una buena fotografía de producto bien iluminada desde su producción hasta el momento del retoque.
En el estudio
Para hacer fotografías de producto es necesario contar con una correcta iluminación que, ante todo, otorgue protagonismo y realidad al objeto o prenda. Para ello, es importante elegir un único tipo de iluminación ya que, de lo contrario, la imagen quedará poco natural. La utilización de diferentes tipos de luz puede distorsionar algunas propiedades del producto, lo que podría generar una impresión errónea a los clientes del eCommerce. Elegir una correcta temperatura de color, tono e intensidad de iluminación es clave para que la imagen del producto sea fiel a la realidad.
En el estudio, se distinguen principalmente dos sistemas de iluminación:
LUZ CONTINUA. Puede ser tanto la luz natural que entra por una ventana como la luz fija que emiten determinadas fuentes de luz artificial. En este caso, es importante que el set se sitúe bien cerca de la fuente lumínica y que cuente con una pantalla reflectora de luz, para conseguir que la luz rebote y no se pierda.
FLASHES. El flash constituye uno de los elementos extra de una cámara fotográfica y su función es dar un golpe de luz en el mismo momento del disparo. En este caso se puede hablar de flash externo o de estudio o monolight. Casi siempre imprescindible se puede incluir un softbox o caja de luz, un complemento que permite suavizar y direccionar la luz del estudio.
Normalmente, cuando se habla de luces de estudio para fotografía de producto se entiende que han de ser focos de al menos 500 w de potencia, de forma que se pueda iluminar a la vez tanto el producto como el fondo en caso de ser necesario. Por otro lado, se distingue entre luces o ventanas cenitales y laterales. Combinándolas se pueden conseguir distintos efectos en el producto, sobre todo en cuanto a la dureza de las sombras. El esquema de iluminación más usual se compone de un flash en modo cenital (desde arriba) entre el producto y el fondo, y dos flashes al frente (o un flash y un reflector) a ambos lados de la cámara.
Para obtener un buen resultado, y sobre todo un resultado homogéneo, es fundamental medir bien la luz con la que se cuenta en el estudio con un fotómetro o revisar en la pantalla de cámara los niveles. De esta forma, la tarea de corrección mediante el retoque será después mucho más sencilla y podrá centrarse en otros aspectos que no pueden evitarse durante la sesión fotográfica.
Correcciones de iluminación mediante retoque
Antes de proceder al retoque de la fotografía es importante tener clara la diferencia entre el concepto de iluminación en fotografía de eCommerce y el de luminosidad. La iluminación en este caso alude a la dirección, sentido, intensidad y temperatura del color, que es lo que va a aportar volumen y profundidad a los elementos, es decir, al producto del eCommerce.
A través del retoque se corrigen los aspectos que distorsionan la realidad del producto, como las arrugas y sombras. En el caso de las arrugas, para evitarlas en el estudio es necesaria una buena luz frontal. Pero si se trata de una prenda que ya está arrugada o si hablamos de una arruga en la piel del modelo que ha surgido por un movimiento o giro, no quedará otro remedio que suavizarla o eliminarla mediante el retoque. Y para ello, normalmente se trabaja con el valor de la luminosidad.
Los programas de edición digital como Photoshop cuentan con diversas herramientas para corregir los valores de luminosidad, como el tampón de clonar o el pincel corrector. Con ellas se consigue difuminar esas pequeñas líneas cuyo volumen se percibe a causa de las sombras. En cada caso, y según la necesidad de cada imagen, la herramienta más adecuada será una u otra.
Cuando se trabaja con los productos de un catálogo, hay que ser cuidadosos para que el juego de luces y sombras tenga un aspecto homogéneo en todas las fotografías. Para conseguirlo, se corrige el punto de iluminación y se hace coincidir la sombra con la nueva perspectiva.
Un error muy frecuente que se comete a la hora de modificar la luminosidad de un producto en fotografía para eCommerce es el de acabar copiando los mismos valores en todos los puntos del objeto. De esta forma sólo se consigue abusar de un mismo grado de luminosidad, y se obtiene un resultado plano en el que podría producirse una distorsión del color y la textura. Para evitarlo es fundamental retocar muy poco a poco y, sobre todo, finalizar la edición de la fotografía con una vista general de la imagen a tamaño estándar.