Con fotos de calidad, se paga más

En eBay, uno de los gigantes del comercio electrónico a nivel mundial, se hicieron la siguiente pregunta: ¿Influye la calidad de la foto en el precio que los clientes están dispuestos a pagar por un producto?
Para responder a esta pregunta, analizaron el comportamiento de cien millones de usuarios y el resultado del estudio fue concluyente: “Hemos podido probar que una mayor calidad en la imagen del producto hace que su precio sea más elevado”. Lo afirma Tom Fastner, arquitecto principal de eBay. Es decir, una foto de calidad aumenta el precio que el cliente está dispuesto a pagar por un producto. Interesante, sin duda.

Cada vez es más evidente que las fotografías de calidad son fundamentales en eCommerce. El informe del Instituto Nacional de Estadística sobre eCommerce y nuevas tecnologías en 2013 revela que los productos que más se vendieron online durante el pasado año fueron ropa, calzado y material deportivo. Productos que, evidentemente, precisan de una gran cantidad de información visual para el cliente. ¿Alguien se compraría un vestido o unos zapatos sin ver bien el producto? Muy complicado, por no decir imposible.
Hasta ahora la evidencia es que unas malas fotos hacían que el cliente no efectuase la conversión por varios motivos: no se fiaba de la calidad del producto, no lo veía bien, no tenía confianza en la seriedad de la tienda online, etc. Numerosos estudios así lo afirman. Pero el análisis de eBay va un paso más allá. No es que tus fotos de calidad hagan que el cliente compre el producto. Es que está dispuesto a pagar un precio más elevado por ese producto.

Se demuestra por tanto la enorme importancia que para una tienda online tiene invertir en fotografías de producto de calidad. Ya hemos hablado en este mismo blog muchas veces de la necesidad de pensar en ellas como una inversión y no como un gasto. Las malas fotografías, poco profesionales y que no ofrecen al cliente todos los detalles que éste demanda provocan rechazo en el usuario y su experiencia de compra se vuelve negativa. Unas malas fotografías pueden provocar que, sencillamente, el usuario cierre el navegador y no vuelva a tu tienda online porque encuentre otra con mejores fotografías que le aporten mayor información y más confianza. Tener malas fotografías en tu negocio online sí es un gasto. Pero apostar por imágenes de calidad es una inversión: tus clientes comprarán más e incluso pagarán más por el artículo. Está demostrado.
Autor fotografías: Jordi Balcells