Interiorismo y HDR: Trucos para una correcta toma
Una de las técnicas más empleadas en fotografía de interiorismo es el denominado HDR (del inglés High Dynamic Range) Esta técnica busca aportar a la imagen el mayor rango posible de niveles de exposición en todas sus zonas, evitando así tanto que las altas luces estén quemadas, como el empastamiento en las zonas de sombra.
LA IMPORTANCIA DE LA TOMA: Para poder obtener una buena fotografía HDR es recomendable hacer como mínimo tres tomas con valores distintos de exposición, esta es una premisa básica para que el programa de retoque elegido sea capaz de aunar bajas, medias y altas luces con resultados aceptables. Si se cree conveniente también es posible trabajar con un número de tomas mayor, pero hay que tener en cuenta que a medida que aumente el número de imágenes, el programa tendrá más dificultades a la hora de automatizar el proceso.
CONSEGUIR UNA CORRECTA EXPOSICIÓN: Para poder realizar una buena fotografía de HDR debemos hallar la manera de obtener como mínimo una toma con buen detalle en las sombras, otra para los medios tonos y por último una para las altas luces.
EL HDR Y LA TEMPERATURA DE COLOR: Una de las mayores dificultades durante el trabajo con imágenes HDR se debe a la dominante de color que emiten las diferentes fuentes de luz. Por ejemplo, al realizar una fotografía HDR de una habitación de una vivienda con amplios ventanales, se debe tener en cuenta que la temperatura de color del interior puede ser distinta a la del exterior, por lo que es necesario tener cuidado a la hora de realizar las distintas tomas. Un correcto balance previo a la toma fotográfica evitará tener que corregir digitalmente las diferentes dominantes, ahorrando así tiempo de trabajo. Un consejo muy útil es encender todas las luces de la habitación aunque sea de día, y no hacer uso del flash en la toma.
En un próximo post hablaremos de cómo retocar con Photoshop las fotos en HDR.