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21 abril, 2014

"Ahora ser Wedding Photographer mola"

Andrés Parro se define unos días como fotógrafo, otros como empresario, otros como organizador de congresos, otro como speaker… y sobre todo se define como «persona». Estudió Mecánica Naval aunque a él lo que más le gustaba era la publicidad y la imagen. En el año 2000 fundó la revista TuBoda, que dirigió durante una década. Durante ese tiempo también organizó la feria Bodasur… y todo esto sin dejar de lado su trabajo relacionado con sus estudios de Mecánica Naval. En el año 2006 decide saltar al vacío: deja su trabajo, fijo y estable, y se lanza de lleno al mundo de la imagen, centrándose en la fotografía nupcial. Apuesta por un estilo diferente y la jugada le sale perfecta. El primer año tiene más de cuarenta bodas por todas España y rápidamente se hace un nombre en el sector. «Yo alucinaba», confiesa.  Su apuesta por innovar y dignificar la fotografía nupcial le lleva a fundar en 2009 Unionwep,  un sello de calidad para fotógrafos de boda. A partir de ese momento, empieza a ser reclamado en otros países para explicar su experiencia en medios especializados y en 2010 le encargan desde Bodaf, el mayor congreso de fotógrafos de latinoamérica, que ponga en marcha Bodaf Europe, evento que ya cuenta con cuatro ediciones en España.
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¿Qué siente cuando escucha eso de fotógrafo de la “BBC”?
Ha dado en el clavo, me atrevo a decir que esta lucha casi personal comienza en un Fotoventas del 2008 ó 2009 no recuerdo exactamente, cuando me encuentro con un viejo amigo fotógrafo de moda, con sus vaqueros rotos, pañuelo al cuello y aires de superioridad y me cuenta lo bien que le va, rodeado de modelos, famosos y luces de neón… y me pregunta: “¿Y tú qué tal? ¿Sigues con tus BBC?” Me sentí indignado por su forma de preguntar, como si mis fotos no tuvieran valor, fuesen inferiores, facilonas…. le pregunté si se había molestado en ver mi trabajo y me dijo que no. Entonces le mostré algo de mis bodas. Se sorprendió gratamente y me comentó que eso era otra cosa, que no era lo que estaba acostumbrado a ver en bodas. Me felicitó y cada uno por su lado.
¿Por qué, tradicionalmente, se ha considerado la fotografía de bodas como una especialidad menor?
Entiendo que ser fotógrafo de bodas nunca ha sido glamuroso. Mola más hacer fotos a modelos o a pilotos de Fórmula 1 que a madrinas, curas o novias. Poco a poco esto va cambiando, ahora ser Wedding Photographer mola, lo que no ocurre en la prensa o cada vez más en la moda.
¿Cuándo y dónde empieza a cambiar esa tendencia?
Pues no hace mucho. Yo comencé a hacer fotos de bodas en el 2006 y tal vez llegué en el momento oportuno, con un producto diferente y con una visión comercial, emprendedora y arriesgada. Es cierto que mis fotos hace seis años eran chocantes, muchos compañeros no lo entendían, pero mi agenda se llenaba rápidamente. En otros países funcionaba este estilo… ¿Por qué en España no? Sencillamente arriesgué y gané. Después de esto llegó la idea de Unionwep, la explosión de internet y las redes, amigos que entienden esta nueva forma de hacer fotos a las novias, Bodaf, técnicas de marketing y saber qué es lo que demanda la novia en cada momento. No hay una fórmula secreta, son prácticas que aplica cualquier empresa puntera y en este caso la apliqué al negocio nupcial. No olvidemos que ser fotógrafo no es solo hacer fotos, un fotógrafo es un empresario y debe pensar como tal.
¿Qué es Unionwep?
Unionwep es un portal web donde tratamos de dar valor a la fotografía nupcial mediante concursos, formación de calidad y una selección de fotógrafos de bodas.
¿Cuáles son las nuevas tendencias en fotografía nupcial?
Es curioso como he podido ver los cambios en este aspecto en muy poco tiempo. Y en ese cambio tiene mucho que ver Unionwep, el cual arrancó con ilusión poniendo al alcance de los novios un selecto directorio de fotógrafos que venían pisando fuerte con propuestas diferentes en fotografía nupcial. Unas propuestas que daban cuenta de ello en la ‘P’ final del nombre, englobando con ello la idea de ‘photojournalist’, por querer hacerlo diferenciador al estar hablando en términos de fotoperiodismo. Hace más de un año, esa ‘P’ cambió para referirse a ‘photographers’ porque, aunque este tipo de trabajos sigan teniendo alma de reportajes afines a las corrientes del fotoperiodismo sin serlo realmente, se han implementado con otros estilos que en muchos casos nos transportan al mundo de la moda o la fotografía pura de autor. Por ello, Unionwep, mediante la elección gracias a los miembros de la comunidad que hacen de jueces, garantiza que la calidad de los nuevos fotógrafos esté a la altura de las expectativas de los novios. Y basa sus premisas en la heterogeneidad, que hace que puedan convivir autores tan dispares como Víctor Lax, el cual imprime todo su sello como creador en la fotografía de bodas; Raquel Benito, que representa esa frescura vintage, o Daniel Colleman que, aunque heredero de la tradición, da un paso más allá para ofrecer aires renovados dentro de la misma.
Un Wedding Photographer tiene que saber captar la esencia del día más importante de la vida de la novia
¿En qué consiste el fotoperiodismo de boda?
Me atrevo a decir que el fotoperiodismo de bodas literal no existe, este estilo trata de no interactuar en absoluto en el día de la boda, tratando de transmitir al 100% el acto… ¿es posible? Si en algún momento el fotógrafo interviene, a esta etiqueta de fotoperiodismo le faltaría credibilidad, y puedo garantizar que casi siempre se interviene.
¿Qué es lo más complicado de fotografiar en una boda?
Para mí, la salida de los novios de la iglesia. Pasamos de iglesias a 5000 ISO a exteriores en 10 segundos y 400 ISO, sumando los niños, abuelos, tíos, vecinos… todos comprimidos en la puerta de la iglesia y entre empujones, arroz y pétalos de rosas, te sientes obligado a captar esos momentos irrepetibles que duran unos segundos.
¿Qué suelen pedir los novios? ¿Cómo quieren que se fotografíe actualmente su enlace?
Nos encontramos de todo, por ello y para no equivocarte, el blog de un fotógrafo debe mostrar lo que le gustaría recibir, su concepto. En mi caso rara vez me encuentro con sorpresas, tengo muy claro cómo preparo mi escaparate (mi blog) y en función a ello ése es el cliente que recibo. ¿Lo más demandado? Naturalidad, sin agobios, fotos de revista pero sin posar.
¿Qué le parece la opción actual de que un amigo aficionado a la fotografía haga el reportaje y se encargue la impresión en un álbum online? ¿Se puede equiparar a los resultados de contratar a un fotógrafo especializado?
Pues hay de todo. Conozco aficionados que superan a profesionales en técnica y creatividad y novias que me han llamado llorando porque confiaron su boda a un primo que le ha arruinado las fotos de la boda y me pide un reportaje postboda. A los aficionados no los veo como enemigo… yo un día lo fui. El enemigo es el aficionado eterno, que no paga impuestos y que compite de forma ilegal. Vale que un aficionado haga un par bodas al año de familiares amigos o compromisos, pero si el número se eleva a diez, quince o veinte bodas y cobra por ello…. eso ya no es un aficionado amigo… y puedo garantizar que muchos se refugian bajo el paraguas de la palabra ‘aficionado’.
Últimamente han proliferado los reportajes de preboda y postboda. ¿Es un servicio cada más extendido? ¿Aporta cosas nuevas?
Bueno, yo lo hago desde el 2006, pero es cierto ya es casi obligatorio. La preboda yo siempre la aconsejo: aporta confianza a la pareja, se rompe el hielo entre el fotógrafo y la pareja y las fotos de la boda son más naturales, la tensión del “que viene el fotógrafo” casi se pierde y va todo mejor. Y el postboda sí que es un extra. Para los amantes del reportaje, es una sesión más relajada, vestidos de novios pero sin la presión de los invitados ni el chef llamando y diciendo que el cocktail está preparado.
Dominar las nuevas tendencias de la fotografía nupcial, reto para el wedding photographer
¿Qué otras tendencias existen actualmente en la fotografía nupcial? ¿Qué es el ‘trash the dress’?
El TTD es la postboda pero más cafre. Personalmente nunca me gustó y nunca usé ese término. En los comienzos de este boom era muy utilizada pero poco a poco fue derivando a la palabra postboda. ¿Tendencias? Hay una corriente que vuelve al carrete, objetivos descentrables y procesados retros.
¿En España estamos abiertos a este tipo de reportajes más innovadores?
Por supuesto, el amigo Pablo Beglez (Premio Revelación Bodaf 2013) es un claro ejemplo. Tengamos en cuenta que las novias que se casan hoy han crecido junto a revistas como Cosmopolitan o Vogue y saben qué es tendencia y qué es lo que quieren. Las novias de antes crecieron junto a Vale o Pronto y su visión fotográfica era completamente distinta a la de ahora. En el Magazine de Unionwep damos mucha prioridad a esta educación visual nupcial.
En la fotografía de bodas el álbum es el producto final. ¿Se ha sustituido esta tendencia dominante por la entrega en CD? ¿Ha avanzado el montaje del álbum en España o nos hemos quedado en las fotos montadas en páginas adhesivas? ¿Qué productos finales se ofrecen actualmente?
Lo del CD también está pasando a la historia. Ahora es el Pendrive personalizado con el logo del fotógrafo lo que predomina a la hora de entregar las fotos en formato archivo. En cuanto al acabado en papel el álbum digital es lo que reina, acabados fine art y gran formato en multitud de acabados. No creo que se pierda la impresión, sea de la forma que sea. En este sentido, recomiendo la lectura de este post, Tu vida en 3×4.
¿Cómo debe ser un buen fotoperiodista de boda? ¿Qué cualidades debe tener?
Discreto, técnico, rápido, preciso y ágil.
En este mismo blog, el fotógrafo Joan Boira comentaba que muy pocos fotógrafos están aprovechando las redes sociales. ¿Son las redes sociales y las nuevas tecnologías un elemento fundamental para el fotógrafo nupcial, más incluso que para otro tipo de fotógrafos?
Sí, sí y sí. Te vas a comprar un coche y… ¿dónde comparas? Te vas de vacaciones y… ¿dónde buscas hotel? ¿Y dónde compras los billetes del avión? Entonces, ¿dónde buscaras al fotógrafo responsable de las fotos de un día tan feliz? Ya lo decía antes, yo llegué justo en el momento adecuado, en el 2006, donde todo esto comenzaba. Yo antes no era Andres Parro, yo era Arteimagen, marca registrada, y mi web no era www.andresparro.com, era www.reportajesdiferentes.com. Nombres comerciales y únicos en el 2006. Si alguien buscaba “reportajes de bodas diferentes”, allí estaba mi web. Hoy es todo mucho más complicado.
¿Se puede ser fotógrafo hoy día sin una web, o por el contrario se ha convertido en una herramienta tan importante como una cámara?
Es imprescindible, a no ser que te llames Mario Testino o Jonas Peterson. Y aun así lo dudaría en un plazo largo de tiempo.
¿El equipo importa? ¿Qué equipo necesita, como mínimo, un fotógrafo nupcial?
Sí importa, aunque soy un defensor nato de que “lo importante no es la cámara, es el camarero”. Un fotógrafo para no correr riesgos debe llevar dos cuerpos, dos lentes, aconsejo una fija y otra zoom y flash por si acaso para iglesias oscuras. También recomiendo llevar un segundo y discreto fotógrafo, en mi caso siempre me acompaña Issa Leal.
El wedding photographer tiene que captarlo todo sin que se note que está allí
En su caso, qué tipo de retoque aplica a sus fotografías, si es que lo aplica.
Ligthroom con presets propios.
A la hora de elaborar un reportaje nupcial de estilo fotoperiodista, ¿cuántas horas se pueden emplear?
Esto no depende del estilo, depende de la boda.
¿Qué tareas le resultan más pesadas?
La gestión de clientes, mails, reuniones, el antes y el después de la boda…
¿Y las más gratificantes?
La satisfacción de saber que soy el responsable de captar momentos tan importantes y el agradecimiento de tantos clientes.
¿Hacia dónde evolucionará el reportaje nupcial?
Miremos a EEUU y lo que allí ocurra, aquí ocurrirá un año o dos después. Afortunadamente este año vivimos un pico en alza en cuanto a número de bodas se refiere, y el año que viene será aún mejor, ya veréis. Muchos dicen que esto es una moda, pero es la evolución de un gremio. Le podemos llamar fotoperiodismo o como quieras, la cuestión es adaptarse, tenga el nombre que tenga. Es cierto que la crisis ha hecho mucho daño. No tenemos receta pero sí sentido común. Los que saldrán peor parados serán los que trabajan más por menos, algunas ferias de novias parecen tómbolas de fotógrafos. Eso es un error. Debemos luchar con creatividad, diferencia y calidad.